
Color uniforme y resistente.
Pintura cerámica
La pintura cerámica en vidrio es un proceso especializado que consiste en aplicar una pintura compuesta por partículas cerámicas sobre la superficie del vidrio. Una vez aplicada, esta pintura se funde al vidrio mediante un proceso de horneado a altas temperaturas, lo que asegura que el color quede completamente integrado en la superficie, creando un acabado permanente, resistente y de alta calidad.
Este tipo de pintura no se desprende, no se pela y mantiene su color incluso en condiciones de alta humedad, exposición solar o cambios bruscos de temperatura. Además, ofrece una amplia gama de tonos y acabados, desde colores sólidos y opacos hasta diseños decorativos—, permitiendo crear piezas funcionales y estéticas a la vez. Es ideal para aplicaciones que requieren durabilidad, color vibrante y fácil mantenimiento, ya que combina la resistencia del vidrio con el impacto visual de un acabado cerámico.
¿Qué es la pintura cerámica?
Acabado uniforme y resistente
La pintura cerámica en vidrio es la solución perfecta para quienes buscan añadir un toque de color sólido y uniforme a sus proyectos, sin sacrificar resistencia ni durabilidad. Este acabado se logra aplicando una capa especial de pintura que se adhiere al vidrio y se somete a un proceso de horneado a alta temperatura, lo que asegura que el color quede fusionado de manera permanente con la superficie.
Su gran ventaja es que mantiene un tono intenso y estable con el paso del tiempo, sin desvanecerse por la exposición al sol o la humedad.
Es ideal para ventanas, puertas, divisiones, fachadas o elementos decorativos en los que se busque privacidad, estética y uniformidad, ya que cubre por completo la transparencia del vidrio.
Con nuestra técnica, puedes elegir entre una amplia gama de tonos sólidos, adaptados a tu estilo y necesidades, logrando un resultado elegante, limpio y resistente que transforma cualquier espacio.
¿Por qué elegir pintura cerámica en vidrio?
No es una capa superficial común: el color se adhiere al vidrio mediante un proceso de horneado a alta temperatura, lo que lo vuelve prácticamente inseparable de la superficie.
Durabilidad
A diferencia de otras técnicas, la pintura cerámica ofrece un acabado perfectamente parejo y opaco, sin transparencias ni marcas. Esto asegura que cada pieza de vidrio tenga una apariencia homogénea, ideal para proyectos que buscan uniformidad visual y un alto nivel de estética.
Colores sólidos y uniformes
Aunque el acabado es sólido, existe la posibilidad de elegir entre diferentes tonalidades para adaptarse a la identidad visual de un proyecto o a las preferencias del cliente.
Amplia variedad de colores
La pintura cerámica es ampliamente utilizado en: