Vidrio templado
Hasta 5 veces más fuerte que el vidrio común, ideal para aplicaciones exigentes.
El vidrio templado es un tipo de vidrio de seguridad que se somete a un proceso de calentamiento controlado a temperaturas cercanas a los 700 °C y enfriamiento rápido mediante aire frío. Este tratamiento térmico aumenta considerablemente su resistencia mecánica y térmica, haciéndolo hasta cinco veces más fuerte que el vidrio común.
A diferencia del vidrio convencional, el vidrio templado está diseñado para soportar impactos, cambios bruscos de temperatura y cargas de viento, lo que lo convierte en la elección ideal para aplicaciones arquitectónicas y decorativas de alto rendimiento.
En caso de romperse, no forma fragmentos afilados como el vidrio crudo; en su lugar, se desintegra en pequeños trozos granulares con bordes menos cortantes, minimizando el riesgo de lesiones.
Por sus características, es ampliamente utilizado en puertas, canceles de baño, barandales, fachadas, mobiliario y una gran variedad de proyectos que requieren seguridad, durabilidad y estética moderna.
¿Por qué elegir vidrio templado?
Hasta 5 veces más fuerte que el vidrio común, soporta impactos, cargas de viento y cambios bruscos de temperatura sin comprometer su integridad.
Alta resistencia
En caso de rotura, se fragmenta en pequeños trozos no filosos que reducen el riesgo de lesiones graves.
Seguridad mejorada
Capaz de soportar temperaturas de hasta 250 °C y variaciones bruscas sin sufrir deformaciones ni roturas.
Resistencia térmica
El vidrio templado es ampliamente utilizado en:
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